martes, 4 de mayo de 2010

puras cosas de locos


-¿a quién en su sano juicio le puede importar la poesía española de los siglos de oro, o la poesía novohispana?, ¿a quién que esté cuerdo o cuerda?
-¿para qué usar en la teoría literaria en español tanto término en alemán, si creo yo existen frases equivalentes en español? icherzählung... -y luego, los teóricos que los usan no los traducen, o explican... qué les cuesta una nota a pie de página!
-a veces sí me desespera tanta alabanza de parte sor juana... aunque no deja de ser sorprendente el ingenio que usó para esos panegírico; en el énfasis en lo formal se perdía el objeto de la alabanza. captatio benevolentiae= falsa modestia, siempre, al menos en el caso de sor juana es muy obvio :P
-esto sí es en serio: a quién en su sano juicio le interesan los tratados renacentistas en latín sobre la epístola! los estudios sobre ellos...

7 comentarios:

Anónimo dijo...

jajajajaja a nosotros? o estamos locos? fuera del ámbito académico, yo confieso que los escritos del siglo 16 y 17 me causan algo así como paz. Hay algo en esa manera de argumentar, de explicar y de exponer que me encanta, a lo mejor se debe a que estoy formada en un catolicismo muy rancio que tenía esa forma de exponer sus teorías mágicas jajajaja
a propósito de la sor juana, la veronica grossi dice en un ensayo que los críticos siempre la tratan como un ave rara, no recuerdo hacia dónde iba esa interpretación (tú lo has de saber mejor), pero me llamó la atención que mencionara eso :P

Carmen Sa dijo...

estamos un poco locos... lo digo sobre todo por mí :P
y concuerdo contigo, esos poemas tienen en ocaciones estructuras y argumentaciones muy lógicas, o pseudo-lógicas... con mucho ingenio... no hay más que ver a sor juana entrar en controversia en ciertos poemas, discurtir tòpicos, dar la contra a otros autores, concluir que el blanco es negro! súper sofista cuando se le daba la gana. me encanta.

sí, eso dice verónica grossi, y muchos. margo glantz tiene unas cosas muy buenas sobre el asunto.
sor juana era considerada rara avis en el sentido de ser montruoso, anómalo. fue así incluso en su época, como dice verónica. por algo tuvo que responder en un romance:

¡Qué dieran los saltimbancos,
a poder, por agarrarme
y llevarme, como Monstruo,
por esos andurriales
de Italia y Francia, que son
amigas de novedades
y que pagaran por ver
la cabeza del gigante,
diciendo; Quien ver el Fénix,
quisiere dos cuartos pague,
que lo muestra Maese Pedro
en la posada de Jaques
¡Aquesto no! No os veréis
en ese Fénix, bergantes;
que por eso está encerrado
debajo de treinta llaves

qué curas... qué padre se defendía :)

No soy yo, eres tú dijo...

Se defendía lindo para ser mujer, dirían algunos por las aulas de letras...

Yo no encuentro gozo alguno en ella, pero me gusta la maravilla y hubiera pagado por verla.

Blas Barajas, escritor dijo...

A mi de por esas fechas sólo me gusta Quevedo, aunque Lope tiene un rollo muy chido. Llegué a pensar que son los únicos que existían. Recuerdo que sufrí mucho el semestre pasado leyendo la Respuesta a Sor Filotea, pero me gustó bastante. A lo demás le entiendo menos.

Carmen Sa dijo...

pucha, yo también hubiera pagado... vale mais.

amor, yo en realidad también sé poco de la literatura de esta época. pienso en otros escritores aparte de los que mencionas, y no recuerdo muchos y los conozco poco.
la respuesta a sor filotea es la onda... toda una creadora de discursos sor juana. le ayudó su inteligencia-genialidad, su disciplina y (en parte) ser barroca. y hay poemas como este en qe demuestra una visión crítica similar a la de la carta, viendo más allà del horizonte de la época. vale la pena leerla

Pancho Demás dijo...

Yo, pues, mi adorada Filis,
que tu deidad reverencio,
que tu desdén idolatro
y que tu rigor venero:
[...]
Ser mujer, ni estar ausente,
no es de amarte impedimento;
pues sabes tú que las almas
distancia ignoran y sexo.

A mi me atrae de Sor Juana el toque lésbico con el que les escribió a sus amantes.

Carmen Sa dijo...

se le daba bien a sor juana eso de elogiar virreynas, mejor que elogiar virreyes, aunque también lo hacía, e incluso en un mismo poema podía dedicar cumplidos fervientes a la marquesa y a su esposo (aunque menos fervientes a este ùltimo, es cierto). en esta época los términos en qe se elogiaba a una mujer poderosa podían tomar elementos de la poesía amorosa petrarquista, de ahí que a veces pareciera la voz poética un alma rendida, enamorada.
y que conste, se trata en este caso de un amor platónico: las almas finas se enamoran de las almas, no de esas cosas impúdicas qe distinguen a un sexo del otro jaajaja... aunque bueno, sí, sor juana también elogió el bello cuerpo de la mujer esta, este ángel terrenal, que no por corpóreo era menos bello e inteligente que un ángel celestial. ;)