viernes, 13 de febrero de 2009

botanón con el méndez plancarte...

De verdad que Sor Juana se pasaba de gaver al escribir cosas como estas en poemas sacros, al hablar de vidas de santos así:

[San Pedro de Nolasco]
los enfermos visitaba
con tanto desinterés,
y su remedio buscaba,
que, como era buen Francés,
del mal francés los curaba.

Pero más se pasaba de gaver el tío Méndez Plancarte, quien daba explicaciones eruditas como la siguiente sin desaprovechar la ocasión para regañar a la monja y su época:

El mal francés: la sífilis... Rara "claridosidad" la de aquel siglo en que una Monja, y en un Villancico cantado en Catedral, hacía tales alusiones sin escándalo de nadie; y ello, por no desperdiciar el fácil retruécano con el buen Francés que era el Santo.

perdón, ya sé, pero de algo me tengo que botanear :P

7 comentarios:

No soy yo, eres tú dijo...

ay carmen, yo con miedo de salir de una habitación y tú riendote de las erudiciones del tio de la Rita. A donde irá a parar este mundo alusinante.

Luego, como en el Quijote la gente le hecha la culpa a los libros.

Carlos Mal dijo...

Què nerd. Una vez los Chufa salimos con unas chicas y empezamos a hacer chistes de Góngora y Quevedo. Nadie se acostó con nadie esa noche.

Carmen Sa dijo...

no, yo sí impresiono a las chicas así... cómo crees que me ligue a la petunia pérez, mi morrita que le encanta qe haga chistes sobre filología y religiones arcaicas, sobre el mito, pedro páramo y esas cosas que tanto le gustan? jejeje

Blas Barajas, escritor dijo...

Nadie se ha acostado nunca con los chufas. Con o sin chistes de Quevedo. Ya ves el Lope... shshshs

Carmen Sa dijo...

jajaja
simón... ni diciéndoles: "qué machín se te uuuunta, mamasita" (haciendo la mímica de ahuecar la manita), ni así caen jajajaja

RoJa dijo...

Nena, a mi si me conquistas con esos poemas... Pero yo quiero ser Sor Juana! besos de esos

Carlos Mal dijo...

Ingenuos. No saben qué tan poblados, qué poblados, no, ¡rebosantes! han estado los tálamos sucios de lso Chufas con chicas de lúbricas curvaturas.

Yo ya no puedo probárselo a nadie, pero los demás Chufas y sus listas interminables de conquistas carnales hablan por mí.